miércoles, 22 de abril de 2009

Atención médica urgente

"Si cobráramos un euro por todos los que vienen hasta aquí sin necesitarlo, nos haríamos ricas". Aquella afirmación apenas segundos después de explicar mi pesar, hizo que me trastabillara en la última sílaba de mi resumida explicación médica. Pero son profesionales. Y con una sonrisa recogieron el guante y completaron su frase primigenia con un "no como usted, al que se le nota que sí necesita atención urgente".

Me resulta imposible decir que siempre he creído que las "Urgencias" de un hospital son más una declaración de intenciones que una realidad plausible. Por fortuna, no visito con asiduidad estas dependencias. Pero hoy lo he hecho, aquejado de un dolor traumatológico en mi mano derecha. Y como quiera que hacía buen día y no tenía prisa, pertrechado con un vendaje casero y el periódico del día, me he plantado en el registro de Urgencias del Hospital de la Princesa a la voz de "verá, me he lesionado la muñeca. Requiero atención médica. Urgente, por favor". A partir de ese instante se han desarrollado los acontecimientos, enmarcados todos ellos en un clima de cordialidad que me ha pillado por sorpresa. Así, entre bromas con mi apellido ("¿Ganso? No serás un ganso, ¿no? Ja, ja,ja") y largos períodos de espera aguardé al momento clave de la consulta: la radiografía.

Estaba bastante tranquilo. Era posible que hubiera llegado al hospital con la muñeca fracturada, pero tras tanta espera, estaba convencido de que aquel mal se había comenzado a curar por sí mismo obedeciendo al dicho "no hay mal que tres horas dure". Así que encaré el pasillo de Radiología como si tal cosa hasta que, tras una puerta, observé hasta seis galenos de cháchara. Dije entonces: "Tengo que hacerme una radiografía". Una muchacha, soliviantada, me espetó: "Ah, sí. Vale, pasa por esa puerta y vete quitándote la camiseta... ah, no, que lo tuyo es una muñeca". El comentario no paso inadvertido para sus compañeros que comenzaron una risotada general, mientras yo pensaba en el cuadro costumbrista que tenía oportunidad de presenciar: uno trabaja y cinco miran. Salí de aquella sala un tanto desconcertado y esperando el diagnóstico de la doctora que me atendía, que en ningún momento me dijo que me quitara la camiseta, quizá habituada a pacientes más atractivos.

"Tienes una distensión en la muñeca. Comprate una muñequera, ibuprofeno y vete al médico de cabecera la semana que viene", dijo la médico con la frialdad que acostumbran a mostrar los sanadores públicos. Luego, me despidió amablemente de su consulta, sin un mísero vendaje en mi mano pero con un cordial "buenas tardes". Supongo que para la venda se necesitarán dos euros.

4 comentarios:

Anónimo dijo...

Esa atencion medica "urgente" que has solicitado ha costado unos 120 euros o asi..... si todo el que se da un golpe hubiera que hacerle una radiografia(que es lo que se cree la gente) imaginate que en un hospital medio se atiende entorno a 300 urgencias dia.... siendo solo golpecitos sin contar con los que requieran analitica electros etc....36000 euros solo viendo golpecitos imaginate el gasto y eso solo las urgencias de un hospital medio luego esta el 061 las urgencias de centro de salud, los que van al medico de cabecera sin tener que ir....etc Cuantos euros se tiran todos los días???

Inés dijo...

Completamente de acuerdo con Anónimo...
Ahora tendrás que hacerle caso a la "médico" a ver si vas a tener que volver y seguimos tirando el dinero,jajajajjaja.

Diego Campo dijo...

Lo que yo me pregunto es cuánto cuestan aquellos seis médicos que estaban tranquilamente sin hacer nada más que chistes malos.

No obstante, y como prueba de que he recapacitado y soy una persona sensible a los problemas actuales, no iré al médico de cabecera esta semana, aligerando así las insufribles esperas de los centros de salud.

Unknown dijo...

Pues se les debe estar llenando bien la boca ahora de "Si cobrase un euro..." con todo el tema de la fiebre porcina...